Testa Matta, “Cabeza Loca” en castellano, es el emprendimiento en el que volcó toda su pasión y experiencia Matteo Viana. Un enólogo y viticultor nacido en Piamonte en 1977, que creció en Toscana. Y se formó profesionalmente en Florencia. Viajó como enólogo a Australia y California (Napa Valley) y desembarcó en Argentina en 2011. Trabajó tres años para Zuccardi Wines (Alambrado, Magna, etc.). También fue gerente tres años de la bodega Elvira Calle. Y enólogo responsable de toda la línea de bodegas Lagarde. A pesar de su expertise y apabullante trayectoria, Matteo es una persona simple y entusiasta. Con la que da gusto conversar.
Testa Matta pasión por el vino de calidad
“Todos esos caminos sumaron”, cuenta Matteo, quien eligió Mendoza para afincarse. “Soy el reflejo de la buena onda que los argentinos tienen conmigo” afirma. Dice que aquí “la materia prima es impresionante”. Aunque también acota risueño. “En todos los otros lugares del mundo llueve mucho más“. Testa Matta surgió en 2020, con 2000 botellas de vino. Y fue un éxito total. Paso a producir 15000. Y ahora su producción está en 45000 botellas. Malbec, Cabernet Franc, Rosé, Blend de Tintas y Extra Brut.
Cuenta como se tuvo que “amoldar al terroir“, a los diferentes suelos. Podría ampliar su producción, pero prefiere poner el foco en aumentar el valor agregado y sumar calidad. Con un dominio y conocimiento de lo que los argentinos consumen. Sabe que por el 50% de nuestra población corre sangre italiana. Y su preferencia por el buen vino. Los suyos tienen una paso de 4 meses en barrica. “Me enamoré de Argentina. Y me enamoré de una argentina. Elijo al país para trabajar“. Entre sus principales compradores están Buenos Aires, Rosario y Mendoza, claro. En 2016, Matteo viajó al norte de Italia para especializarse en sus vinos blancos.
Testa Matta, aceite de oliva Extra Virgen
El padre de Matteo también es enólogo. Y tiene unas tres hectáreas de olivares en Italia. Testa Matta tiene su aceite boutique “over the top”, cuenta su creador. En donde el protagonista absoluto es el sabor. Matteo también es nieto del Presidente de la “Accademia italiana della cucina“. Sus aceites de oliva extra virgen son 100% Frantoio y 100% Arauco. En partidas limitadas con inconfundible estilo italiano. El Frantoio con origen en Alto Agrelo y Vistalba, Lujan de Cuyo. Y el Arauco de Perdriel. De aroma intenso y sabor elegante y poderoso. “Este aceite ha hecho mi felicidad“, confiesa Matteo que consume 4 de sus propias botellas al mes.
“Cosas buenas, cosas saludables”
Matteo contagia su entusiasmo. Tiene la filosofía de la venta directa (mediante Facebook, Instagram y Whatsapp). Está en constante búsqueda y todavía no ha incursionado en el mercado exterior. Tiene un enorme respeto por la tradición y el sabor. Y una logística organizada capaz de llegar a cualquier destino. No se deja amedrentar por los costos de los insumos, su apuesta es a la calidad. “Hay que estar un poco loco para arrancar un emprendimiento”, confiesa.
