Astérix es uno de los mejores cómics de todos los tiempos. El maridaje entre los guiones de René Goscinny y los dibujos de Albert Uderzo es una delicia. La primera historieta que leí fue “Astérix en Hispania”. Me la prestó un compañero de la primaria. Como un poseso iba al Parque Rivadavia a comprar alguna historieta usada (más barata y con mejor papel). Mi papá me las regalaba cuando estábamos de veraneo. O si me enfermaba (recuerdo leer varias con fiebre). Todos los dibujos son excelentes, ni hablar de los chistes. Creo que Uderzo con su pluma genial “saca la ficha” a los distintos pueblos. Y sin dudas uno de ellos es el romano.
Astérix & los romanos: centuriones, senadores y legionarios
Astérix es una enciclopedia. De historia, latín, costumbres, etc. Y una muy entretenida. Mi primer contacto con la historia romana (y creo que el de muchos). Quiero hacer foco en la caricatura de los romanos. Sus rostros nerviosos, irritados, iracundos, temerosos. Algunos fortachones con quijadas prominentes. Otros más esmirriados con grandes narices aguileñas. Gestos sobradores, miradas impías. Coquetos, ineficaces, burócratas, acomodaticios. Me eran rostros y gestos familiares. Los podía encontrar dentro de mi familia, amigos. Preceptores de la secundaria, mozos, verduleros, carniceros y hasta algún ex militar.
Astérix y los romanos: Goscinny en Buenos Aires
La historieta Astérix apareció por primera vez el 29 de octubre de 1959. En la revista “Pilote”. Y en 1961, salió el primer álbum: Astérix el galo. René Goscinny nació en París en 1926. A los dos años su familia se mudó a Buenos Aires. En dónde viviría hasta sus 17 años. “Pasé mi juventud en Buenos Aires, que es la ciudad más europea de Sudamérica. La aventura argentina me resultó muy agradable”. Realizó sus primeros bocetos infantiles en un cuaderno Avon. Mientras estudiaba en el Colegio Francés de Buenos Aires. “Aquel era un país totalmente apacible y próspero. Recuerdo mi adolescencia como una época feliz en los años previos a la Segunda Guerra Mundial, dentro de la pequeña burguesía acomodada”.
Se dice que estuvo en contacto con la historieta Patoruzú (1928). Del genial Dante Quinterno (de familia oriunda del Piamonte). Y que el mismo Upa fue la inspiración de Obélix. Y que sus pantalones a rayas celestes y blancas son un homenaje a la camiseta de Racing. Equipo del que Goscinny era fanático. Incluso que hay una inspiración entre la poción que bebía Astérix y la fuerza sobrehumana de Patoruzú. “Todos los que se dedican a esto dicen que empezaron dibujando en los márgenes de sus cuadernos de clase. Es verdad, pero es una pena que no haya sido al revés: tendríamos que haber puesto en el margen todo lo que nos enseñaban, y reservar la página para aquellos dibujitos.”
Quis, quid, ubi, quibus auxiliis, cur, quomodo, quando
Volvamos a los romanos. Con sus rostros decadentes, corruptos, ridículos. Todos tenemos algún tío con cara de Centurión. O conocemos acaso a algún obeso ojeroso con párpados caídos. Que tranquilamente podría ser un senador. Astérix fue traducida a 111 idiomas. Y claro, yo también tengo cara de romano de Astérix.
