Reconocida durante años como la Torre de los Ingleses, y al día de hoy como Torre Monumental. Este monumento, de estilo renacentista, característico de la Ciudad de Buenos Aires hoy cumple 104 años. Se comenzó a construir hacia fines de noviembre de 1916, y se inauguró el 24 de mayo de ese año. Está ubicado en la zona de Retiro, en Avenida Dr. José María Ramos Mejía 1315. Es distinguido como Monumento Histórico Nacional, y forma parte del recorrido turístico de museos.
Cuando uno transita por la zona de Retiro, por la estación o sus alrededores es imposible no detenerse a observarla. El monumento es imponente, así como también el reloj que se encuentra casi en la punta de la torre. Durante todo el siglo XX, este monumento fue testigo del desarrollo urbano de la Ciudad. Por ella pasaron distintas historias de las oleadas inmigratorias que convirtieron a Retiro en uno de los accesos principales para entrar a Buenos Aires. Y al día de hoy sigue siendo un fiel testigo de las miles de personas que circulan alrededor de ella.
Los orígenes de la Torre
La torre fue donada a la ciudad por la comunidad británica residente en el país en ocasión del Centenario de la Revolución de Mayo. Para su ejecución se realizó un concurso que fue ganado por el arquitecto Ambrose Poynter. Él decidió crearla según el estilo renacentista que era tendencia en Inglaterra a fines del siglo XVI. La obra se demoró debido al comienzo de la Primera Guerra Mundial. La construcción de la torre estuvo a cargo de la empresa Hopkins y Gardom Ltd, y todo el material, los técnicos y obreros especializados vinieron desde Londres.
Durante muchos años La Torre Monumental estuvo cerrada, y recién en el año 2001 se realizó su reapertura. En ese entonces comenzó a funcionar como Centro de Informes de Museos para brindar servicios al público sobre la oferta de los distintos museos de la Ciudad de Buenos Aires. Luego se volvió a cerrar, y en el 2019, después de una puesta en valor integral, reabrió al público para lucir como lo es hoy. Gracias a esa restauración, hoy se puede acceder a su interior y hasta su mirador.
Características
Cuenta con sesenta metros de altura y está revestida con una combinación de ladrillos rojos y piedra labrada. La estructura se emplaza sobre un basamento con cuatro escalinatas a cada lado y vertederos en sus esquinas. Además, en su fachada pueden reconocerse los escudos del Reino Unido y la República Argentina. Está decorada con flores de cardo, rosas, dragones y tréboles, emblemas de Escocia, la Casa Túdor, Gales e Irlanda.
A su vez, en su interior la torre cuenta con un mirador que está a 40 metros de altura. El mismo está ubicado en el sexto piso, y permite apreciar una vista de 360 grados de la Ciudad. El mirador aloja el carrillón y cinco campanas de bronce, la mayor pesa siete toneladas. Suenan cada quince minutos: cuatro campanadas a las y cuarto, ocho a las y media, doce campanadas a las menos cuarto y la melodía completa a la hora en punto. Hasta este lugar no puede acceder el público.
También la torre está conformada por el reloj que se encuentra en el séptimo piso. El reloj es de la prestigiosa relojería “Gillett & Johnston”, de Croydon England y es una pequeña réplica al que está en el Big Ben. Éste posee cuatro cuadrantes de opalina de 4,40 m de diámetro con un péndulo que supera los 4 metros de altura, y pesa 100 kg. La melodía del reloj es “Los Cuartos de Westminster”, la misma del Big Ben.
Cómo se puede ingresar
La experiencia sin lugar a dudas vale la pena vivirla. Consiste en recorrer a la torre por dentro, y llegar hasta su mirador para apreciar las fabulosas vistas de la ciudad que éste ofrece. El ascenso hasta esos 40 metros de altura se realiza por un ascensor, totalmente renovado, que llega al balcón del sexto piso.
La entrada general para poder ingresar cuesta $100. Jubilados, estudiantes, personas con discapacidad y sus acompañantes, menores de 12 años y grupos de estudiantes de colegios públicos pasan gratis. Los días de semana se la puede visitar los lunes, miércoles, jueves y viernes de 10.30 a 16.30 h (el último ascenso es a las 16 h). Sábados, domingos y feriados de 9.30 a 18.30 h (último ascenso a las 18 h).
Cuando uno llega hasta el mirador se encuentra con una vista panorámica de la ciudad, y se pueden recorrer los cuatro puntos cardinales. Del lado del Río de la Plata los días muy despejados hasta se puede llegar a ver la ciudad de Colonia, en Uruguay.
También desde allí se puede disfrutar de una vista aérea de Plaza San Martín, con el Edificio Kavanagh, y todos los palacios y edificios que rodean la zona. Hacia el Norte se aprecia la estación de trenes de Retiro. Y hacia el Sur se ve de cerca el Hotel Sheraton, y la traza de la avenida Leandro N. Alem junto al Metrobus del Bajo.
La visita a la Torre Monumental es uno de los paseos recomendados. Cuando la ciudad retome su vida habitual, y la torre vuelva a estar abierta al público amerita realizar este paseo. Uno puede obtener vistas de la ciudad de Buenos Aires totalmente distintas a las habituales. Y guardarse un hermoso recuerdo.
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